Siete años despues

Bueno, aquí estoy. No he podido pasarme por aqui porque he estado muy liado este verano, pero bueno, intentaré pasarme más por aquí a partir de ahora.
Subo este fic, a ver que os parece, dedicado a Silvialisonpotter.

El tren escarlata:


Era media tarde en las vastas extensiones que precedían a inmensos bosques en algún lugar al norte de las islas británicas. Campos de trigo se mantenían inmutables al alejado mundo de la ciudad, allí solo se respiraba tranquilidad. Reinaba el silencio, el más absoluto silencio, pero este silencio era roto unas pocas veces al año, cuando un magnífico e inmenso tren de vapor cruzaba el paisaje a gran velocidad, dejando tras de sí sólo un reflejo escarlata.

El tren trasportaba en su interior alumnos de una escuela. Pero no una escuela cualquiera, sino una escuela muy especial, ya que esta se dedicaba a enseñar magia y hechicería a sus alumnos.

Dentro del tren, como cada vez que este hacia su recorrido hacia la escuela, estaba una señora que vendía dulces paseándose por los compartimentos. Haciendo la rutina que cumplía siempre que el tren hacía su recorrido entró en uno de los compartimentos a ofrecerles dulces a los alumnos, en este compartimento habían tres jóvenes hablando. Mientras les ofrecía ranas de chocolate y zumo de calabaza la puerta se abrió de repente y con mucha fuerza, y otro joven casi la tira al suelo de un empujón al querer entrar en el compartimento, pues le había dado un susto de muerte.

-¡¡Mira por dónde vas, muchacho, que casi me matas!!

-Perdone señora, lo siento mucho. -se disculpó el jóven sinceramente. Era un chico no muy alto, con el pelo corto y de color marrón claro, al igual que sus ojos que recordaban extrañamente al color de la miel. Tenía una complexión atlética, se notaba que era deportista.

La señora, indignada y viendo como los otros tres alumnos estaban a punto de reventar de la risa, decidió irse dejando solos a los cuatro chicos y despidiéndose con un "adiós" muy soso. Cuando estos acabaron de reírse (tardaron un buen rato) empezaron a hablar muy animadamente.

-Esta temporada el campeonato de Quidditch va a ser nuestro, - dijo señalando al escudo de Gryfiindor de su baul-, lo presiento, sobretodo teniendo a dos amigos míos en el equipo. -dijo un muchacho con el pelo negro, los ojos oscuros, de poca estatura, además tenía la nariz muy pequeña y sus dientes y su boca eran también muy diminutos.
Otro de los chicos gesticuló una débil sonrisa al oír el comentario de su amigo. Este era mucho más alto que los demás y con la piel pálida como si estuviera alumbrado permanentemente a la luz de una vela, tenía además los ojos muy oscuros y el pelo negro y muy liso, que le llegaba hasta mitad de la espalda, recogido en una larga coleta.

-Es verdad que tenemos un buen equipo este año, Pólux, pero las otras casas también tienen grandes equipos, recuerda lo mal que lo pasamos el año pasado contra Slytherin. -respondió el chico del pelo marrón que había empujado a la mujer de los dulces al entrar en el compartimento.

-Se supone que tú, Derek, tendrías que ser más optimista, siendo cazador, y además Vincent (dijo señalando al chico alto y moreno que había sonreído antes sin decir palabra) es el guardián. –respondió otro chico, con el pelo rubio y muy cuidado, de estatura media y con los ojos azules. Parecía sacado de un cuento de hadas, siendo él el típico príncipe que rescata a su amada. Este chico ya se había puesto una túnica que le delataba como alumno de la casa Gryffindor debido al escudo, los otros al verle se acordaron de que ellos no se habían puesto aún sus túnicas, así que sacaron otras de forma idéntica.

-Oye Derek, ¿dónde está Tyler, no venías con él? -preguntó Pólux.

-Sí pero se ha quedado saludando a Áspid Hatred, ese chico tan raro de Slytherin, y decía que luego se pasaría a ver a su novia Christie y a su hermano Philip, así que aún tardará un poco en venir.

Acto seguido entró por la puerta un chico un poco más alto que Derek o Pólux, con el pelo corto, lacio y de color negro, al igual que sus ojos, que eran de un negro brillante, casi metálico.

-De ti estábamos hablando ahora mismo, Tyler, ¿qué tal con Christie, eh? -preguntó el chico de pelo rubio y los ojos azules en tono pedante al chico que acababa de entrar.

-Bastante bien la verdad, Galaad, he pasado ahora a saludarla, después de ver a Áspid Hatred -habló como si no se hubiera dado cuenta que Galaad lo había preguntado para incomodarle.

-No sé como te puede caer bien ese Slytherin. Sólo tiene un amigo que está en tercero y eso que él ya está en séptimo. Por algo será. - Dijo tajantemente Pólux.

-Pues conmigo es bastante amable. Es verdad que es un poco reservado pero aún así yo creo que es un buen chaval. -replicó Tyler.

-Yo no me fío de él, ¿es un Slytherin, no? -volvió a replicar Pólux-. Además siempre va solo o acompañado de ese Craig Marduck, que va a tercero, también en Slytherin , como si no le hiciera falta nadie más, con aires de suficiencia y de grandeza. Además, siempre que le he ido a decir algo me ha tratado bastante mal.

-Dice que os habla así porque sabe que vosotros habláis mal de él a sus espaldas- dijo Tyler.

-¿Cómo puede saber eso?- preguntó Derek.

Enseguida Pólux y Galaad acusaron a Tyler con la mirada. Tyler, como sabía que no tardarían en acusarle, se defendió rápidamente.

-Yo no he dicho nada, os lo juro, ¿somos amigos, no?

Durante unos minutos hubo un silencio que se tardó en romper lo que pareció una eternidad, y aunque Tyler no había dicho nada, sabía que sólo Derek, su mejor amigo, le creería, mientras que Pólux, Galaad y posiblemente Vincent (del que era un completo misterio saber como se lo tomaría debido a su forma de ser tan fria) seguirían desconfiando.

-Ya estamos llegando -predijo Vincent, hablando por primera vez desde hace un buen rato, a lo que el tren no tardó nada en pararse completamente invitando a todos los ocupantes a salir de él. Fuera era ya de noche, y el griterío de los alumnos al bajar a la estación de Hogsmeade dejó en un segundo plano el chirriar de los grillos, que hasta entonces era el único ruido perceptible en el pueblo.

Pólux y Galaad salieron sin decir palabra y Vincent se despidió con un tímido adiós, así que se quedaron solos Derek y Tyler.

Derek creía a Tyler cuando decía que él no les había acusado de nada, pero sabía también que Galaad y Pólux eran bastante tozudos y tercos, y que tardarían un poco de tiempo en que se les pasase el enfado. Los dos amigos salieron del tren sin hablar y vieron como la estación estaba llena de alumnos del colegio. Mientras aún estaban bajando los escalones del tren oyeron una voz aguda y con un cierto tono de histeria:

-¡¡Tyler!! -La voz procedía de una chica con la piel del color del café con leche, con el pelo muy rizado de color castaño, era casi tan alta como Tyler y estaba bastante desarrollada para tener quince años. Tenía una expresión muy alegre. La chica enseguida fue a los brazos de Tyler y se besaron, dejando a Derek a un lado con cara de resignación. Cuando pararon, Tyler le dijo:

-Pero si nos acabamos de ver en el tren, Christie.

-Pero es que ya te echaba de menos. -le dijo mientras le daba otro beso en la boca y le sonreía.

Derek estaba a punto de irse a buscar a Pólux, Vincent y Galaad sintiéndose allí fuera de lugar cuando Christie se dirigió a él:

-¿Cómo estás, Derek?

-Bien, gracias, ¿y tú?

-Bien, muy bien -dijo mientras pasaba su brazo por la espalda de Tyler-, por cierto, te presento a mi amiga Virgil, ¿no la conoces, verdad?

Acto seguido Christie se apartó a un lado para presentarle a una chica que había detrás suya, era algo corta de estatura, pues Derek no era muy alto y le sacaba casi una cabeza, tenía el pelo de color rojo oscuro, como una manzana muy madura, la piel algo pálida, sobretodo comparada con la piel tan bronceada de su amiga Christie, y los ojos eran negros como el carbón. Tenía la cabeza inclinada hacia el suelo, y con la cara tan roja como su pelo, que Derek intuyó que era debido a la vergüenza.

La chica saludó con una voz muy tímida y sin levantar la mirada del suelo, y antes de poder decir nadie algo más se escuchó a alguien decir con una voz muy grave:

-¡¡Los de primer año, por aquí, por favor!! -La voz salía de un profesor llamado Hagrid, que además hacia las funciones de guardabosques y era el encargado de acompañar a los de primer año al castillo. Enseguida Tyler pegó un salto y puso una cara muy rara:

-Tengo que ir a ver a Philip -Tyler se fue instantáneamente, y enseguida Virgil le preguntó algo entre cuchicheos a Christie que Derek no llegó a entender.

-Philip es el hermano menor de Tyler, empieza este año en Hogwarts -respondió Christie a la pregunta de Virgil.

Derek se despidió de las dos amigas y se fue a buscar algún carruaje tirado por algún tipo de animal invisible(es la única explicación que a Derek se le ocurría después de darle muchas vueltas durante largo tiempo) hasta que encontró uno donde estaban Pólux, Galaad y Vincent.

Por otro lado, Tyler estaba buscando a su hermano entre todos los asustadizos alumnos de primer año, cuando al fin lo encontró en una fila de alumnos, que al igual que él, comenzaban este año su educación mágica.

-Por fin te encuentro, Philip, ¿Qué tal el viaje? ¿Estás bien? -le dijo Tyler con un tono de voz que dejaba adivinar una sobreprotección hacia Philip.

Philip parecía estar algo asustado y asintió con la cabeza de arriba a abajo sin demasiada convicción. Este se parecía mucho a su hermano mayor, sólo que tenía el pelo mucho más corto (casi un corte militar) y del color de la ceniza, a diferencia de su hermano, que era completamente negro, además, era muy bajito, incluso para tener once años.

Mientras Tyler hablaba con su hermano intentando tranquilizarle (se había pasado el verano asustándole sobre la ceremonia de selección), una mano gigante se puso en su hombro tratando de llamarle la atención. Era el profesor Hagrid:

-Perdone señor Fox (ese era su apellido), pero nos tenemos que ir. Deje al muchacho, ya tendrá tiempo de hablar con él después de la ceremonia de selección.

-De acuerdo -dijo Tyler asintiendo con la cabeza-. Adiós Philip, luego te veo. Seguro que nos toca en la misma casa, en Gryffindor. Adiós a usted también profesor. -dicho esto, Tyler se despidió de su hermano con una sonrisa.

Tyler se fue a buscar un carruaje, pero no encontró ninguno, en ese momento oyó a su espalda una voz aguda e histérica que ya le era muy familiar:

-¡Tyler, ven! -Era Christie y a su lado su amiga Virgil, subida en un carruaje y avergonzada por el grito que había dado su amiga y que había hecho que todos los alumnos que había cerca se giraran.
Tyler se subió al carruaje y descubrió que aparte de Christie y Virgil había dos personas más, una era Bill, el hermano pequeño de Christie, aunque pequeño sólo por la edad, ya que tenía catorce años, uno menos que Tyler, pero era mucho más grande y corpulento que éste, y aunque tenía la piel del mismo tono de café con leche que su hermana, no era ni mucho menos, a juicio de Tyler, la mitad de guapo de lo que lo era su hermana, ya que su cara le recordaba a un gorila.
Bill y Tyler se habían llevado mal desde el año anterior, nada más empezar a salir Tyler con Christie, ya que Bill no quería que su hermana saliera con él por motivos desconocidos. Esto hacía pensar a Tyler (además de a Derek, Pólux, Galaad y Vincent después de ponerse pesados con el tema durante una temporada) que Bill era un completo amargado. Al lado suyo estaba Matt Murdock, el mejor amigo de Bill, los dos llevaban una túnica con un escudo de un tejón que les distinguía como alumnos de Hufflepuff. Virgil y Christie llevaban una túnica con un águila como los alumnos de Ravenclaw.

Al subirse al carruaje, Bill y Tyler ni se miraron a la cara, lo que disgusto notablemente a Christie.

-¿No podéis llevaros bien ni aunque sea por mí? –Protestó Christie, a lo que ninguno de los dos se molestó en contestar y solo giraron la cabeza para otro lado.

El viaje hasta el castillo se hizo muy incómodo para todos, pese a los esfuerzos de Christie de reconciliar a su novio y a su hermano por enésima vez desde que empezó a salir con él:

-¿Cómo llevas los estudios para los exámenes de TIMO de este año?- le preguntó Christie a su novio Tyler.

-La verdad es que mal -reconoció Tyler esbozando una sonrisa-. Me he pasado todo el verano haciendo el tonto con Derek, o dando vueltas contigo por el callejón Diagon.

Christie no quería hablar de sus citas veraniegas con Tyler, no al menos delante de su hermano pues sabía que le molestaba muchísimo que Tyler fuera su novio, así que intentó que el tema de los exámenes no se desviara:

-¿Y tu Virgil, que tal con los exámenes?

Pero Virgil parecía que estaba demasiado asustada como para responder. Estaba mirando fijamente hacia donde en teoría deberían estar unos caballos que tiran del carruaje. Christie se dió cuenta enseguida de lo que pasaba.

-¿Otro año igual? Virgil, ya te he dicho muchas veces que no hay ningún caballo fantasmagórico que tire del carruaje, estos van solos -Pero Virgil pareció no inmutarse a las palabras de Christie.
A Tyler todo este asunto empezó a darle un poco de congoje, así que se sintió muy aliviado cuando por fin el carruaje llegó al colegio y se tuvo que ir a su mesa del Gran Comedor, por lo que al separarse de Christie le dio un beso, aunque ni el mismo supo si lo hizo para despedirse de su novia o para enfurecer todavía más a Bill, y si lo hizo por esto último lo consiguió, pues Tyler oyó como Bill, con su cara de gorila, le refunfuñaba a su amigo por lo bajo mientras se alejaba, lo que le hizo sonreír mientras entraba por su cuenta en el Gran Comedor, donde se celebraría la ceremonia de selección en unos momentos y destinarían a su hermano Philip a una de las casas de Hogwarts.

Aunque este reecrito me da palo leerlo...

Porque como ya lo he hecho...

jejejej

Ahora, me pongo a leer la continuacion! (ya seria hora, pero bueno).

XD